Miguelitos
Embajadores de Sudamérica en Europa
Helado Infinito es de esas bandas que gustan porque equilibran muy bien sus melodías y atmósferas variopintas. Con sonidos folclóricos y electrónicos, logran una mezcla perfecta entre tradición y evolución. Esto sin mencionar que además combinan muy bien el poder femenino y masculino en una mágica performance de su música. Todo un Yin Yang sónico.
Guido Gutiérrez F.
Helado Infinito es un dúo de pop alternativo formado por Loreta Neira Ocampo (Chile) y Victor Borgert (Argentina) en Marzo de 2016. Su música se destaca por mezclar el pop, con el folk, el hip-hop y la electrónica en canciones que hablan con honestidad sobre el amor, existencialismo, viajes y amistad.
El proyecto comenzó en La Plata (Argentina) y creció en un viaje mochilero alrededor de México y Europa, viaje que desarrolló su manera itinerante e independiente de tocar y grabar su propia música.
Tanto sus dos álbums «Canciones Dispersas» (2017) y “El Movimiento del Error” (2019), como su EP «Una sombra me alumbra» (2019) fueron totalmente compuestos, grabados, mezclados y masterizados por los mismos miembros de la banda, contando también con colaboraciones de sus amigos alrededor del mundo. Esta forma de trabajo es la marca que caracteriza el sonido y el espíritu de Helado Infinito.
Helado Infinito se ha presentado en más 25 países y actualmente se encuentra de gira por Europa.
Viajes y todo eso:
Después de grabar su primer disco «Canciones Dispersas» de manera itinerante en distintos lugares de México, Helado Infinito fue por primera vez a Europa en Diciembre de 2017. En ése momento, con una formación de guitarra acústica y trompeta, tocaron puertas de bares y centros culturales y se presentaron en Alemania, Eslovenia, Eslovaquia, Dinamarca, Suecia, Croacia, República Checa y Escocia. ¿Cómo lo hicieron? Tocando a la gorra, o a cambio de hospedaje y comida. Así pasaron 3 meses y luego volvieron a México, donde pasaron dos meses trabajando en la isla de Cozumel, siendo la parte musical de un show de dragqueen y dando talleres de música en la Municipalidad. Después de eso (segundo semestre de 2017), regresaron a Sudamérica y se presentaron en Argentina, Uruguay y Chile.
Desde Octubre 2017 a Marzo 2019 Helado Infinito estuvo establecido en Santiago de Chile y sumó a su show en vivo algunos sintetizadores, sampler y un cuatro venezolano. Mismos integrantes, más herramientas. En ese período Helado Infinito se presentó en Creamfields junto a Dj Tweeter, también fueron seleccionados para participar en Kiltronik (ciclo organizado por el Centro Cultural de España), y participaron de varios eventos de música independiente junto a nombres como Niña Tormenta, Saltador, Violeta Castillo, Dadalú, Chicarica, entre muchos otros. En Santiago, durante esos meses, grabaron «El Movimiento del Error», su segundo álbum lanzado en Marzo de 2019 y luego, a fines de ése mismo mes, se fueron a México, donde pasaron dos meses y medio tocando en distintas ciudades (Ciudad de México, Mazatlán, Cancún, Playa del Carmen, Puerto Morelos, Bacalar, Mérida, etc.) todas las semanas.
Con invitaciones de festivales en Europa (Crossover Festival en Zagreb, Croacia, Garden Party na Korze en Trnava, Eslovaquia, Drienok Festival, en Mosovce, Eslovaquia y Noise Mobility Festival en Munich, Alemania), Helado Infinito comienza en Mayo de 2019 una campaña de crowdfunding para poder cruzar el océano y así poder presentarse en estos eventos. Lograda la meta, en Junio se van a Europa por supuestos 3 meses y se presentan en distintas ciudades de República Checa, Eslovaquia, Alemania, Croacia, Hungría, Albania, Bosnia, Serbia, Bulgaria y Kosovo, entre fines de Junio y Agosto. Dada la calurosa respuesta del público hacia la música de Helado Infinito y las buenas condiciones laborales para los músicos, estos deciden quedarse y sacan una Visa que les permite quedarse en el viejo continente por 1 año. Así continúan el viaje y se presentan semanalmente en algún punto de Europa diferente (muchos conciertos especialmente en República Checa, Eslovaquia, Polonia, Hungría), siempre viajando en bus y con todo su equipaje al hombro.
Luego de una gira por España y Portugal a comienzos del 2020, Helado Infinito fue invitado a dar dos conciertos y una charla sobre autogestión en la música en Lviv, Ucrania. Esa invitación fue el puntapié para pensar una gira que se realizaría entre fines de febrero y comienzos de abril de 2020 y que tendría conciertos en Ucrania, Polonia, Lituania, Letonia, Estonia, Finlandia, Suecia, Dinamarca, Alemania y República Checa. Con todo organizado, Helado Infinito comenzó el tour, pero sólo pudo hacer 11 conciertos de los 21 agendados, pues la crisis del Covid-19 se hizo presente. Los shows en Ucrania, Polonia, Lituania y Letonia fueron logrados. Los otros quedan pendientes.
Estábamos en Riga, Letonia, y ahí nos empezaron a llegar las cancelaciones de los próximos conciertos. Tuvimos que repensar nuestros movimientos, y como nuestra base la tenemos en Eslovaquia, pensamos volver ahí, pero ya habían cerrado las fronteras, así que cachamos que Alemania aún las tenía abiertas y como yo (Loreta) tengo familia allá en Munich, nos fuimos para allá. Estamos aquí en Múnich desde el 17 de Marzo y aún no sabemos bien cuándo podremos irnos. Aquí pasamos los días ayudando a mi familia en lo que podamos, con aseo y orden y cocinar y lo que haya que hacer, básicamente. Tenemos suerte de tener un refugio cariñoso. También tenemos suerte de que la casa queda al lado de un ex aeropuerto, así que hay mucho espacio y poca gente. Estamos aprovechando y hacemos música con el clarinete, la trompeta y la pocket operator en unas sesiones cortitas que hemos llamado «Extraños Picnics» y que estamos compartiendo en nuestras redes sociales. Está lindo eso. También estamos aprovechando para grabar nuevas canciones.
También aquí hay un centro cultural que se llama Glockenbachwerkstatt, en el que habíamos tocado 2 veces el año pasado, y ellos nos llamaron para invitarnos a hacer un live streaming desde el centro cultural, así que lo hicimos y como el centro cuenta con ayuda de la Municipalidad, también nos pagaron y eso nos ayudó un montón en estos tiempos. Así que así, vamos haciendo cositas, lo que surja, para sobrevivir. ¿Lo que viene? Ni idea. Seguimos haciendo los Picnics y grabando música. Ojalá salir a tocar pronto, en el verano, y así poder pagar las cuentas y seguir creciendo.
¿Sienten que la música se vive distinto allá, o que, por el contrario, justamente es la que nos une como ciudadanos del mundo? Aquí en Europa nosotros estamos (o estábamos, más bien, antes de que esta pandemia frenara todo) viviendo de nuestras canciones. Aquí hemos experimentado el poder vivir de la música de una forma sana, sin tener que estar persiguiendo cosas en las que sinceramente no estamos interesados. Siendo simplemente nosotrxs y tratando de hacer lo que hacemos de la mejor manera posible, hemos podido viajar, tocar y vivir sin mayores complicaciones (hasta ahora, claro).